Editado por: Mario Cerna
Un golpe de estado es la acción ilegal de tomar y destituir al gobierno de momento. Generalmente es ejecutado de manera violenta por fuerzas militares, pero también puede ser una alianza entre militares y civiles.
A lo largo de la historia, se ejecutaron, según los registros históricos, más frecuentemente en el siglo XX, y son más comunes en países en vías de desarrollo, especialmente en África, Asia y América Latina.
Los golpes de estado pueden tener diferentes motivaciones, como el descontento con las políticas gubernamentales, la corrupción, la violación de derechos humanos, la inestabilidad económica o social, entre otras razones.
Los grupos que realizan golpes de estado suelen argumentar que están interviniendo para restaurar el orden, la justicia o la estabilidad en el país, aunque estos objetivos no siempre tienen un sustento bien intencionado.
Las implicaciones de un golpe de estado
La experiencia del golpe de estado de 2009 en Honduras, contra el expresidente Manuel Zelaya (2006-2009) evidenció un enorme impacto económico negativo para el país.
En primer lugar, mucha de la cooperación internacional no reconocería un golpe de estado. Eso implicaría frenar o congelar cualquier ayuda de cooperación multilateral con el país.
Además, la economía en general se retraería, es decir el crecimiento se frenaría por la incertidumbre ante la falta de seguridad ciudadana y sobre todo la seguridad jurídica, por la volatilidad política del país.
El artículo 272 de la Constitución de Honduras establece que las Fuerzas Armadas son profesionales, no deliberativas y apolíticas y que están supeditadas al control civil. Sin embargo, en ese mismo artículo se les otorgan funciones políticas: «defender la integridad territorial y la soberanía de la República, mantener la paz, el orden público y el imperio de la Constitución, los principios de libre sufragio y la alternabilidad en el ejercicio de la Presidencia de la República». Esas contradicciones en la definición misma de sus funciones explican el papel político de los militares hondureños.
La cuestión militar. El golpe de Estado en Honduras como desafío a la democracia y al sistema interamericano
Sin duda se registraría violaciones a los derechos humanos fundamentales: estados de excepción a la orden del día, limitaciones a la libertad de prensa, libertad de movilidad y libertad de expresión.
Actualidad Honduras 2023
Luego de una etapa de 12 años, que gobernó el Partido Nacional (2010-2014 Porfirio Lobo Sosa y 2014-2022 Juan Orlando Hernández) en el país se acentuó la fragilidad y vulnerabilidad del sistema democrático.
Honduras trascendió a nivel internacional por sendos casos de corrupción y narcotráfico, que había infiltrado las más altas esferas de poder tanto en el gobierno, como en el sector privado y otros de la sociedad hondureña.
Mientras esto ocurría, el Partido Libertad y Refundación (LIBRE), bajo el liderazgo del expresidente Manuel Zelaya, estableció las bases para arrebatarle el poder a los nacionalistas y es así que ganan las elecciones presidenciales de 2021 y Honduras registra la primera presidenta de Honduras, Xiomara Castro.
Tras casi dos años de gobierno, la debilidad en el sistema sigue latente y continúa pasando factura, en este caso al Partido Libre.
La presidenta Castro ha sido fuertemente cuestionada por la falta de acciones para atender problemas de inseguridad, falta de empleo, alto costo de la vida, roces con cierto grupo de empresarios (por su inclinación ideológica de izquierda) ineficiencia de algunos de sus ministros, entre otras.
Durante las últimas semanas han crecido las voces disonantes en torno a la imperatividad de un golpe de estado, contra la presidenta Castro.
Las redes sociales han servido de nicho para alimentar esa idea. Por ejemplo, el general en condición de retiro, Romeo Vásquez Velázquez, ha publicado en sus redes sociales diferentes videos en los cuál se encuentra alistándose con su uniforme.
Otros usuarios han creado videos promoviendo un golpe de estado como respuesta a la inconformidad contra el gobierno de Castro.
@elsymendez903 #CapCut #Romeo @romeovasquezelgeneral ♬ Se Van – Johnny Ventura
La respuesta oficial, es decir de la presidenta Xiomara Castro y del general José Fortín Aguilar, que entra en condición de retiro en diciembre de 2023, actual jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas (FFAA), no se hizo esperar.
Durante la ceremonia del 158 aniversario de la Fuerza Naval de Honduras, tanto el general como la presidenta expresaron su repudio contra los golpes de estado en Honduras.
El general Fortín Aguilar en su discurso incluso acusó a varios generales en retiro de estar promoviendo un golpe de estado.
Golpes de estado en Honduras
Desde su independencia en 1821, Honduras ha sufrido múltiples golpes de estado, incluso uno en el siglo 19 pocos años desde su concepción como República efectuada por José Arce contra Dionisio de Herrera.
Para el siglo 20 y 21, Honduras se encuentra en el segundo país de Centroamérica con siete intentos exitosos de golpe de estado, seguido de Panamá en primer lugar con ocho.
También se tiene que destacar la dictadura de Tiburcio Carías Andino desde 1933 a 1948, donde a pesar de ser temas relacionados en la política (Golpes de Estado y Dictaduras), se refieren a etapas y situaciones diferentes en la gobernabilidad de un país.
Un golpe de estado se refiere al acto de derrocar un gobierno establecido, mientras que una dictadura es una forma de gobierno en la que el poder está altamente concentrado en manos de uno o unos pocos líderes.
Las dictaturas se caracterizan, según los hechos históricos, por la vulnerabilidad del respeto a los principios democráticos y los derechos civiles. Es posible que un golpe de estado conduzca a la instauración de una dictadura, pero no todos los golpes de estado tienen ese resultado.
Estos son algunos de los años y los actores principales de estos actos contra la democracia: